El diccionario de RAE define el verbo procrastinar como la “acción de aplazar, diferir”, cuantas veces en nuestras vida cotidiana dejamos para mañana lo que podemos hacer hoy, así vamos postergando conversaciones, acumulando desordenes, aplazando situaciones que por la falta de tiempo o el no querer asumir conscientemente una responsabilidad lo vamos dejando para después o para mañana, ese mañana nunca llega, lo que postergamos lo acumulamos como energía, peso muerto que cae sobre nosotros haciéndonos sentir cansadas. Al llegar al fin del día o al fin de semana sentimos que no avanzamos y que no nos alcanza el tiempo para ordenar y reorganizar el despelote que tenemos a nuestro alrededor.
Si llevamos esto a nuestro espacio mental y emocional, ¿no nos pasa lo mismo? El caos que vemos afuera también esta adentro nuestro, vamos acumulando miedos, inseguridades, rollos mentales, ideas viejas. El desorden que tenemos afuera no es mas que una proyección mental de nuestros miedos, miedo al rechazo, al abandono, al cambio, miedo a ser olvidado o a olvidar, miedo a la carencia y simbolizan además confusión, falta de enfoque, caos , inestabilidad, incertidumbre en tus objetivos, inseguridad sobre tu identidad o lo que quieres de la vida. El lugar de la casa en el que el desorden o el acumulamiento se encuentran refleja que área es problemática en tu vida. Por ejemplo, se dice que el clóset de ropa, refleja cómo te encuentras emocionalmente y que una vez lo organices tus conflictos internos menguaran, o que un cubrecama o edredón sucio y desteñido sobre tu cama refleja que tu vida amorosa ha perdido brillo también (principios aplicados en el Feng Shui).
Conservar objetos rotos o dañados por largo tiempo pensando en repararlos algún día significan promesas y sueños rotos, el desorden en tu habitación significa que eres una persona que deja las cosas inconclusas y que tienes dificultad para tener una pareja o trabajo estable.
Aclaro que en los pre y adolescentes esta condición es normal como parte de la formación de su personalidad y se ve potenciada por el cambio y alboroto de sus hormonas, para los adultos reza un precepto universal “así como es afuera es adentro”, chequéate como estas internamente.
¿Cómo nos podemos ayudar para comenzar a organizar nuestra vida?, desde la Terapia Floral hay esencias que nos ayudan a:
- trabajar nuestros miedos como Mimulus, Aspen, Rock Rose, Evening Primerose;
- calmar el murmullo mental: White Chesnut;
- salir del estado de procrastinacion, tomar acción, determinación y nos ayudan a ordenarnos: Tansy, Blackberry y Cayane;
- salir del estado de inercia y de la apatía: Wild Rose;
- cortar con viejos paradigmas mentales: Walnut, Honeysuckle
- abrirse al cambio, flexibilizar posturas mentales y fluir: Bahunia, Rock Water, Nalca
Esto es como prender una vela en un sótano, al principio vemos todo muy oscuro por la falta de energía y nos encandilamos con tanta luz. Cuando uno inicia conscientemente un proceso de reordenamiento del pensamiento, las emociones se van también ordenando y a nivel físico también hay un ordenamiento celular. A nivel familiar (visto como un sistema) basta con uno de sus miembros se empiece a ordenar para que vayan de uno haciéndolo.
Cuando empiezas a trabajar en ti, al principio hay un resentir energético de nuestros campos físico, emocional, mental y espiritual, también a nivel doméstico se empiezan a ordenar nuestras relaciones, amistades y trabajo.
Como es un trabajo de introspección personal sugerimos que para empezar lo hagas de un profesional instruido como Terapeuta Floral, siempre es necesario ir de la mano de un acompañamiento terapéutico serio y responsable cuando se trata de tu salud emocional y mental.
Los dejo invitados para seguir compartiendo experiencias y conocimientos de estos sistemas naturales de vida, en estas sesiones de podcast y en mis redes sociales.